Niños y lentes de contacto

15.01.2020

Muchos padres son reacios a que sus hijos usen lentes de contacto, por miedo o desconocimientos en la mayoría de los casos; algunas de la s razones que exponen son:

Es demasiado joven para usar lentillas

¿Para qué ponerle lentillas si le va a subir la graduación?

Su cuidado es complicado

Perderá o romperá muchas

Pero aunque pueda parecer que niños y lentes de contacto son incompatibles la verdad es que no lo son tanto.

Los materiales de las nuevas lentes de contacto son biocompatibles, así que de entrada no existe razón a nivel de salud ocular que justifique que un ojo sano, a cualquier edad, no pueda usar este tipo de corrección visual. De hecho, en lo referente a los niños son otras variables las que tendremos en cuenta para ver la idoneidad de adaptar lentes de contacto o no:

  1. Nivel de madurez del niño: mantiene su cuarto ordenado, realiza tareas domésticas y escolares, etc.
  2. Higiene personal
  3. Motivación del niño para usar lentillas
  4. Supervisión de los padres

En cuanto a las necesidades visuales de los niños debemos tener en cuenta que en edades tempranas es cuando mayor desarrollo tiene el cerebro, siendo muy importante que las imágenes que perciben sean lo más nítidas posible para poder desarrollar todo el potencial visual. Así encontramos que:

  1. En niños con hipermetropía, astigmatismo o estrabismo, donde es muy importante que miren a través de la graduación y no por encima de la gafa, el uso de lentillas es ideal.
  2. En niños con miopías medias o altas o con gran diferencia de graduación entre un ojo y otro con la adaptación de lentes de contacto nos aseguramos la eliminación de posibles aberraciones producidas por los cristales de las gafas.

Ventajas de las lentes de contacto.

  1. Mejora de su autoestima al mejorar la percepción de su propia apariencia física.
  2. Al aumentar la confianza en sí mismos mejoran en sus relaciones sociales.
  3. Aumento de su habilidad en actividades deportivas al mejorar su visión, pues muchas veces o bien se quitan las gafas para practicar deporte o tienen miedo de recibir algún golpe y romperlas.
  4. Si cambia la graduación la podemos actualizar rápidamente, pues normalmente se suelen comprar en packs de 3 ó 6 meses.

Riesgos.

Las posibles complicaciones del uso de lentes de contacto son las mismas que en los adultos y normalmente son consecuencia de un mal uso de las mismas (usarlas más horas de las recomendadas, quedarse dormido con ellas, no realizar su limpieza adecuadamente). Algunas de esas complicaciones son:

  1. Sequedad ocular: picor de ojos, sensación de arenilla; se agrava con un uso inadecuado de las lentillas.
  2. Conjuntivitis: es la inflamación de la mucosa que recubre al ojo.
  3. Úlcera: es dolorosa y favorece la aparición de infecciones si no se trata adecuadamente.

Qué tipo de lentillas adaptar.

Cada caso es diferente y requiere un estudio individualizado, pero entre los diferentes tipos de lentillas encontramos:

  1. Diarias: no requieren mantenimiento, ya que cada día se usan lentes nuevas; por este motivo se minimiza al máximo el riesgo de infecciones.
  2. Desechables: las encontramos con diferentes frecuencias de reemplazo aunque las más habituales son las de reemplazo mensual, con un programa de uso fácil de recordar (las cambiamos siempre el mismo día del mes) y si una lente se pierde o rompe durante su manipulación no supone un gran inconveniente.

Si aún tenéis dudas sobre el uso de lentes de contacto por vuestros hijos estaremos encantados de resolverlas; visitadnos y os las aclararemos.