Producto: Gafas de sol ¿polarizadas o no polarizadas?

31.03.2022

Las gafas de sol son un complemento de moda, un elemento con el que mostrar nuestro estilo personal igual que hacemos con nuestro vestuario, corte de pelo, etc.; pero son mucho más, porque nos protegen del exceso de luz, de las radiaciones UV, las podemos graduar para ver nítidamente cuando tenemos alguna ametropía.

Algunos las usamos durante todo el año, pero es a partir de estas fechas, cuando comienzan a ser los días más largos que las noches y más luminosos, que empezaremos a ver a mucha más gente usándolas.

Cuando vamos a adquirirlas debemos tener en cuenta que, en lo que se refiere a las lentes, hay dos grupos entre los que tendremos que elegir: polarizadas o no polarizadas. Este es un concepto que cada vez nos suena más y aunque muchas veces no sabemos exactamente en qué consiste, sí tenemos claro que puede aportar grandes mejoras a nuestra calidad de visión.

Intentemos primero aclarar el concepto de polarización para comprender mejor cómo actúan las lentes polarizadas. La luz natural está compuesta por partículas que vibran en todas las direcciones; cuando esta luz llega a una superficie y es rebotada o refractada las partículas comienzan a vibrar en una única dirección, diciendo entonces que esa luz está polarizada. Según esto, cuando la luz se refleja en una superficie horizontal como el suelo, agua o nieve, se polariza vibrado todas esas partículas en la misma dirección de ese plano horizontal, convirtiéndose en una luz muy brillante que ocasiona un incómodo deslumbramiento a nuestros ojos.

Con un filtro polarizado conseguimos hacer que sólo la luz que nos interesa lo atraviese, bloqueando la que vibra en una determinada dirección. Por ello, colocando en las lentes un filtro con una determinada orientación evitamos que toda esa luz reflejada en las superficies horizontales que nos provoca el deslumbramiento lo atraviese y llegue a nuestros ojos. El filtro polarizado nos quita luz que nos deslumbra y nos da así más calidad de visión.

Eliminando con nuestras gafas de sol polarizadas esas luces brillantes reflejadas en las superficies obtenemos los siguientes beneficios:

  1. Visión más relajada al eliminar el deslumbramiento cegador
  2. Mayor nitidez y contraste
  3. Mejora la percepción de los colores percibiéndolos más vivos e intensos

Por ello podemos darnos cuenta que las gafas de sol polarizadas nos aportan beneficios y mejor visión que las que no lo están, pero hay ciertas actividades para las que las encontramos realmente ideales:

  1. Conducción: al eliminar los deslumbramientos producidos por las superficies mojadas de las carreteras, los salpicaderos y otros coches nos anticiparemos mejor a cualquier posible peligro de la carretera.
  2. Deportes acuáticos: desaparecen los reflejos de la superficie del mar o del río; incluso veremos el fondo del río y los peces bajo la superficie del agua si somos pescadores.
  3. En zonas con constantes cambios de luminosidad, cuando pasamos continuamente de sol a sombra, al ojo le cuesta menos y se adapta más rápidamente.