Salud ocular: Limpieza del estuche de las lentes de contacto

28.04.2022

Ya hemos hablado de los diferentes sistemas de limpieza para el mantenimiento de nuestras lentes de contacto, pero de poco sirve llevar a cabo a la perfección ese proceso si después nos olvidamos del estuche en el que guardamos las lentillas para su desinfección.

No supone un esfuerzo extra limpiar el estuche una vez nos hemos puesto las lentes y evitaremos así que se convierta en un foco de infección por la proliferación de microorganismos.

Para ello lo que haremos es, como hemos dicho, una vez nos hemos puesto las lentes de contacto, lavar el estuche con agua caliente y jabón neutro eliminando cualquier resto de desecho que haya podido quedar en el mismo tras la limpieza de las lentillas. Lo aclaramos con agua caliente y lo dejamos secar bien, al aire, en un lugar con buena ventilación para que no quede ningún rastro de agua. Ya sólo queda guardarlo hasta que volvamos a realizar el mantenimiento de las lentes de contacto, cuando nos las quitemos al final de la jornada de uso.

Esta rutina sólo nos llevará unos pocos minutos y nos puede evitar muchos problemas y complicaciones en la salud de nuestros ojos.

Además de mantener limpio el estuche lo renovaremos periódicamente, no utilizando el mismo durante más de 3 meses. Lo normal es estrenarlo cada vez que abrimos un nuevo bote de solución de mantenimiento, pues los fabricantes suelen incluir el estuche con las diferentes soluciones.